La Dimensión Económica:
La dimensión económica del medio ambiente general depende del sistema económico en el cual opera la organización. Este puede ser capitalista, socialista o comunista.
Bajo un sistema capitalista, el sector privado de los activos que producen los bienes y servicios, una organización puede actuar bajo cuatro condiciones: monopolio, oligopolio, competencia imperfecta y competencia pura. Un monopolio existe cuando una sola organización abastece el mercado; bajo oligopolio un pequeño número de organizaciones proporciona la oferta de un mercado, caso de la industria del automóvil, aviones o neumáticos.
Bajo condiciones de competencia imperfecta existe un gran número de organizaciones que compite en el mercado, comercializando productos o servicios diferenciados, como ejemplo de estas organizaciones se pueden mencionar los restaurantes y los salones de belleza. Por último, bajo competencia perfecta las firmas son muchas y venden el mismo bien y los consumidores tienen información completa acerca de los precios y los bienes vendidos por las empresas. Cada una de estas condiciones tiene un gran significado en los administradores. Un monopolista debe preocuparse de mantener esta situación, bajo condiciones de competencia perfecta debe preocuparse de justificar las diferenciales de precio por su producto; el que actúa bajo competencia perfecta tratará de producir al menor costo posible y mantenerse bien informado de las condiciones del mercado.
Además de estas estructuras de mercado, las políticas monetaria y fiscal del gobierno también influencian a la organización, a través de la tasa de interés del mercado de capitales.
La Dimensión Tecnológica:
A pesar de que la organización puede desarrollar su propia tecnología, ésta generalmente se obtiene del medio ambiente general. La tasa de desarrollo ha sido espectacular estos últimos cuarenta años; como ejemplo tenemos, entre otros, los circuitos integrados, los semiconductores, las fotocopiadoras y las computadoras. Otro impacto tecnológico ha sido la robótica: hay fábricas enteras operadas por robot.
Si se quiere ser competitivo, la administración debe preocuparse de las innovaciones tecnológicas y así poder evaluar si se incorporan a la organización.