Cuando nos referimos a la clasificación de cuentas, determinamos los grupos de cuentas existentes, dando sus características específicas y diferencias entre sí. En cambio cuando hacemos referencia a la nomenclatura, establecemos que cuentas conforman cada uno de los grupos anteriormente establecidos. Razón por la cual; la relación entre la clasificación de cuentas y la nomenclatura de cuentas es directa y estrecha, más si la nomenclatura emerge con consecuencia de la clasificación.

Por todo lo expuesto anteriormente; debemos utilizar la clasificación de cuentas estudiada en el anterior tema —Teoría de las cuentas— y a ésta adicionarle las cuentas que integran, es decir incorporar un listado de éstas,
Cuentas de balance
Las cuentas de balance ya fueron estudiadas en el tema anterior y sabemos que se sub-clasifican en:
- Cuentas de activo
- Cuentas de pasivo
- Cuentas de patrimonio
- Cuentas regularizadoras
Cuentas de resultado
Las cuentas de resultado ya fueron estudiadas en el tema anterior y sabemos que se sub-clasifican en:
- Cuentas de costo
- Cuentas de gasto
- Cuentas de ingreso
Cuentas de orden
Las cuentas de orden ya fueron estudiadas en el tema anterior y sabemos que se sub-clasifican en:
- Cuentas de orden deudoras
- Cuentas de orden acreedoras
Por lo expuesto anteriormente, estamos en condiciones de preparar una nomenclatura de cuentas, pero debemos realizar la siguiente aclaración:
Para aplicar el procesamiento de registración de transacciones u operaciones comerciales en contabilidad existen dos bases:
- Base efectivo
- Base devengado
Nosotros, prepararemos solo y únicamente de momento una nomenclatura de cuentas sobre la basa del efectivo, puesto que la base del devengado será estudiada más adelante en el tema titulado Asientos de ajuste, esto por un aspecto eminentemente didáctico.

